Lo que hacemos tiene un impacto más allá de socorrer y atender necesidades recurrentes de los participantes o por causas de desastres naturales/situaciones inesperadas. Cáritas de Puerto Rico, a través de donaciones de otras organizaciones, fundaciones y asignaciones especiales, es un contribuidor importante de nuestra economía.

Desde supermercados, tiendas, mueblerías y ferreterías hasta choferes para entregas, servicios de catering para el programa de comidas calientes, hasta pagos de profesionales para horas de consejería, entre otros. Así también apoyo a servicios educativos mediante pago de matrículas/becas y compra de artículos escolares, servicios de salud, apoyo profesional para destrezas y adiestramientos, entre otros. Durante el huracán María canalizamos $17 millones para la adquisición de comida, suministros, materiales de construcción, entre otros.